Reducir Negatividad & Incrementar Positividad

¿Qué hace que las relaciones funcionen?

Los equipos de alto desempeño más destacados, a los que a mí me gusta referirme como “Equipos Generativos”, logran proyectar un futuro esperanzador para prosperar incluso en entornos adversos o inciertos. Y lo logran gracias a que atienden y generan un -necesario- desbalance intencionado (3:1) entre lo Positivo sobre lo Negativo.

Te invito a que pensemos por un instante en quienes queremos terminar convirtiéndonos a la larga, quienes queremos ser como personas, familias, equipos y organizaciones. ¿Qué queremos alcanzar en estas relaciones humanas importantes para nosotros?

 ¿Cómo sería, por ejemplo, el líder en el que, finalmente, quieres terminar convirtiéndote?

Elige para afinar esta exploración una relación que es -verdaderamente importante para ti-. Entre las muchas relaciones importantes que seguro tienes, elige una, personal o profesional. Piensa ahora en: ¿Cuál es tu mayor aspiración para esa relación?

¿Qué te gustaría ver crecer en ella? Más amor, alegría, confianza, complicidad en una familia o relación de pareja o más eficiencia, alineamiento, toma de decisiones, seguridad psicológica, entre otras posibilidades en el caso de un equipo. ¿Qué sería? En tus propias palabras, aquello que quisieras ver más en esa la relación que has elegido.

Las respuestas que podamos encontrar a estas preguntas nos revelan buenas noticias: primero, contamos ya en nuestras vidas con relaciones que consideramos importantes y relevantes, y segundo, nos importa el futuro de estas relaciones y su evolución.

Si prestamos atención, incluso pareciera ser que “algo” nos impulsa ya en una dirección, existe en alguna parte un futuro anhelado que nos atrae. Un futuro que de alguna manera entendemos como “ideal”, mejor o de nivel superior para esa relación.

Te invito ahora a que imagines, que en un futuro cercano,  esta relación -importante para ti- ya alcanzo tus mayores aspiraciones para la misma, aquello que quieres ver crecer en ella ya es una realidad. ¿Cómo sería esta nueva versión de la relación? ¿Qué ha cambiado en el futuro, de como viene siendo hoy?

Por lo general, esta visión anticipatoria nos suele revelar un horizonte desde el que se proyecta un abanico de nuevas posibilidades y oportunidades; nos muestra un espacio potencial desde donde comienzan a ser posible cosas, que hoy no lo son.

De otro lado, la no tan buena noticia es que para que las aspiraciones que tenemos para esas relaciones tan importantes para nosotros terminen alcanzándose, se requiere que exista un desbalance intencionado de lo Positivo sobre lo Negativo con una razón mínima de 3:1 (Fredrickson, 2009). En otras palabras, de manera recurrente debemos realizar acciones y comportamientos que reduzcan la negatividad y aumenten la positividad dentro de nuestros equipos, por ejemplo.

En palabras de Ron Fry (2020), necesitamos herramientas y métodos para crear al menos esta mayor proporción de “esperanza e inspiración frente a la desesperación y el déficit” que a veces generamos cuando vemos nuestras relaciones como -un problema a resolver-.

En definitiva, aquello que queremos ver crecer en nuestras relaciones no va tener posibilidades de crecer y aquel futuro anhelado que nos atrae nunca será alcanzado, a menos que cuidemos de manera recurrente el estado de ambas dimensiones: negatividad y positividad.

Volvamos a nuestra pregunta inicial, ¿Qué es lo que hace que las relaciones funcionen? Pues, como hemos venido observando, entre otras cosas, para que las relaciones sean exitosas de manera sostenible y para que se genere “un espiral ascendente de creatividad y funcionamiento óptimo”, es clave que, desde nuestro autoliderazgo y el liderazgo de equipos, realicemos este doble trabajo de: incrementar positividad y reducir negatividad.

Los equipos de alto desempeño más destacados, a los que a mí me gusta referirme como “Equipos Generativos”, logran proyectar un futuro esperanzador para prosperar incluso en entornos adversos o inciertos. Y lo logran gracias a que atienden y generan un -necesario- desbalance intencionado (3:1) entre lo Positivo sobre lo Negativo.

 ¿Qué es aquello que hace que funcionen tus relaciones más importantes? ¿Qué les da vida?

¿Qué es aquello que aporta positividad a tu relación más importante en particular? ¿Qué generaría más positividad en ella?

¿Qué ayudaría a reducir la negatividad?

¿Cómo dirías que viene siendo el -necesario- desbalance (3:1) entre lo Positivo sobre lo Negativo?

¿Qué tan preparado dirías que esta el liderazgo dentro de tu organización, para su rol crucial de incrementar positividad y reducir negatividad?

Si en tu equipo y organización están interesados en incorporar a su liderazgo herramientas y métodos que ayuden a reducir la negatividad e incrementar la positividad ¡conversemos!